Esa piñita madura y a punto de estropearse que tenía en la nevera ha acabado hecha mermelada. En el libro de "Mermeladas con Thermomix" de editorial Susaeta aparecía ésta y no me pude resistir. La receta original lleva:
- 1 kg de piña
- 10 hojas de menta
- 1 limón
- 700 gr. de azúcar.
Pero yo la hice "my way" que diría Frank Sin-nata así que mi piña pesaba 750 gr., le eché un puñado de menta (no me apetecía contar hojitas... <me quiere, "pos" claro que me quiere, me quiere, "por tu puesto" que me quiere, me quiere....>, 350 gr. de fructosa (me parece más sano que el azúcar y, francamente, no distingo el sabor y el limoncito no podía faltar.
Se pone en la Thermo todo menos la fructosa (el limón sin piel y sin parte blanca), 4 segundos, velocidad 6.
Se añade la fructosa y se programa 30 minutos a 100º C, velocidad 1. Lo dejas y te vas a mimar gatos por la casa adelante hasta que oigas "la llamada de la selva", PIRIRIRIIIIIIII, PIRIRIRIIIIIIIII... eso es que la Thermo ya ha terminado.
Y el resultado es ¡¡FABULOSO!!
Y llamo a mi madre, mi referente en mermeladas caseras, y le pregunto, "Oye, Ma, ¿y ahora qué hago?", pues nada, a ponerlas boca abajo mientras estén calientes y así se conservan por más tiempo... aunque me temo que no van a durar un suspiro, pero bueno, yo lo hice "by the flies" (dicho en inglés perralleiro, "por si las moscas", un ejemplo mítico de un profe de inglés para que no hiciésemos traducciones literales pero, ¡¡son tan divertidas!!, jaja). En el libro viene una manera mucho más compleja para guardarlas pero será cuando me dedique a hacer mermeladas en tamaño tanque y necesite un método de conservación más elaborado.
Chico ya ha conquistado toda la casa. No ha dejado un rincón sin olisquear, frotar, marcar, toquetear... ya sólo le falta conquistar a Su Majestad la Reina Calimochi, que parece que no están por la labor. Por ahora se libra porque el Chico tiene su pata en vías de curación y no está para bailes aunque, no sé cómo lo hace, que saltó por un mini-ventanuco y se nos fugó con todo su morrete. Como ya se sube a sofás, cama, y lo que sea, pues le hemos puesto la butaca para que esté más cómodo y, ¡¡como no!!, cual funcionario en sus primeros días, ya ha tomado posesión:
Le hemos puesto una tienda de campaña de Hills, que ha pasado por mis cuatro gatos de casa y ninguno le ha hecho caso pero Chico, ¡¡Chico sí que es un campista de narices!!... estoy por llevármelo a las Rías Baixas como antaño, jejejeje. sería el terror del Camping.
De su patita va muy lentamente. Chico apareció en la calle, cojeando, muy sucio y asustado. Tenía una pata fracturada desde hacía más de un mes y una luxación en la cadera. Tuvo la Gran Suerte de toparse con una gente maravillosa que lo cuidó, hizo una colecta para su operación (bastante costosa) y lo cuidaron en su recuperación. A lo mejor Chico se queda cojito para siempre (estuve a punto de llamarle Ness... el Cojo Nes... pero tengo esperanzas de que se recupere en un 90%), probablemente tendrá artrosis en esa patita pero ¿quién sabe lo que nos espera en un futuro?, teníamos un gato naranja lleno de vida, jóven y sano, y en un mes se nos apagó así que, una vez más, me queda clara la lección de que hay que vivir el día a día y hoy por hoy, estamos muy contentos con Chico y lo vemos muy feliz, muy juguetón, con ganas de comerse el mundo y hecho un terremoto. Es un golfote.
Y os damos las gracias a todos vosotros, a todos los que lo habéis hecho posible. A todos los que arrimáis el hombro por otros que lo necesitan, sean gatos, niños, ancianos, o a vuestro vecino de al lado, a veces con dinero, otras veces con vuestros cuidados y cariño, que también son muy importantes.
Un beso muy grande.
Canción: Alanis Morissette - Thank You
